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Zaira: ¡Que guapotes habían sido los dos gemilitos! -Le susurró a Paula-
Paula: Nena, no te zarpes...
Zaira: No me zarpo ni nada, solo soy realista o no?
Paula: Bueno, si, pero cállate.
Hernán: ¿De qué están hablando ustedes dos?
Paula: Nada, nada... -Tomó un sorbo de la bebida que contenía su vaso-
El ambiente entre ellos era un especie de amistad, como si fuera que un grupo nuevo se estaba armando en medio de un boliche a donde la música retumbaba, acompañadas con las luces que iban y venían por todo el sector del boliche.
Cuando Hernán vio a Zaira se sorprendió, ellos no sabían nada que sus amigos ya se habían cruzado antes, pura casualidad. Todo fue confuso pero con tan solo Zaira y Hernán explicaron como se conocieron y todo, se entendió un poco todo.
Pero lo que mas llamaba la atención eran las miradas entre ellos; entre Pedro y Paula. No paraban de mirarse, cuando uno desviaba la mirada él otro aún seguía perdido en la suya. Era como si fuera que solo ellos dos y nadie mas que ellos dos estaban en ese boliche.
Mientras Federico cuando se cruzo con Violeta, su mundo se perdió en ella. Se perdió por completo en su belleza y sus sonrisas. Se perdió en su forma de hablar y sus ojos colores verdes. En su pelo lacio que cada vez que movía su cabeza su pelo volaba por el aire.
Zaira: Les parece si vamos yendo chicas? -Paula asintió-
Violeta: ¿Ya? -Hizo puchero-
Zaira: Encima que vos tenes que arreglar ese problemita con tu novio...
Violeta:.....
Paula: Mejor vamos...
Federico: Si quieren las llevamos!!
Pedro: ¿Eh? No. -Dijo rápidamente-
Paula: Que poco caballero que sos nene, igual gracias. -Dio media vuelta y comenzó a caminar-
Claramente las chicas la siguieron, ellas solo los saludaron con la mano a los demás.
Federico: ¿Qué carajo hiciste? -Dijo pegándolo en el brazo a su gemelo-
Pedro: ¿Nada?
Hernán: Boludo... -Le pegó en la cabeza- la hubiéramos llevado.
Pedro: Fo, vayan ustedes... mi chica me espera.
Entre risas él se fue a una a donde se encontraba un grupo de chicas bailando sin parar y tomando.
Federico: A no, esté chico es un boludo total... ¡vamos a buscarlas!
Hernán: ¿Vos dices que estén aún ahí afuera? -Fede encogió sus hombros-
Federico: No hay muchos remis por acá...
Mientras afuera las chicas estaban tratando de parar algún remis que se cruzaba pero todos iban ocupados o llamados; miles de autos pasaban y una que otra bocina o grito para ellas había. Eso era lo que mas le incomodaba a Paula.
Paula: ¿Ves lo que dije? Odio venir a estos lugares... -Farfullo- Odio tener que usar esto... -Señalando su vestido-
Violeta: Ay, te ves hermosa... -Dijo haciéndola girar-
Zaira: Si, te dejamos bella.
Paula: Apa, mira ahí vienen sus chicos.
Violeta: ¿Eh? Mi chico no esta acá...
Paula: Si, si, hacete la boluda... -Revoleo los ojos-
Violeta: ¿De qué hablas?
Paula: Vimos, ambas... -Señalo a Zaira- como lo mirabas y le sonrías... -Violeta la miro mal- Cuando me me miras así es porque tengo la razón. -Sonrió triunfante-
Violeta: Tarada, cállate que ahí vienen.... ¡Hola de vuelta! -Dijo sonriendo, mejor dicho sonriendole-
Federico -Sonrió-: Vamos que la llevamos...
Violeta: Buenísimo. -Dijo sonriente-
Paula: ¡Buenísimo! -Dijo imitándola-
Violeta la pego y todos se comenzaron a reír, entre risas iban al auto. Bueno, todos no se iban riendo, Paula era la que estaba tratando de buscar con su mirada a Pedro, si quería saber a donde estaba. Tenía esa duda, hasta que alguien se le acerco al oído y le dijo...
Federico: ¡Esta adentro! -Le susurro al oído-
Paula: ¿Ah? -Abrió la puerta para que sus amigas subieran-
Federico: Se que lo estas buscando... -Dijo apoyando su brazo en la puerta-
Paula: Ay, nene, ¿qué decís? -Dije subiendo- Ni me conoces... -Fede rió y cerro la puerta-
Federico: ¡Mujeres! -Hizo un gesto irónico-
Luego de unos minutos de viaje hasta la casa de Paula y Violeta a donde Zaira se iba a quedar, ellos se fueron cuando ellas ya habían entrado.
Apenas Paula entro a su casa se fue directo al baño y se dio una ducha, ya que por culpa de Pedro quien le tiro esa bebida. Luego entro a su cuarto a donde su amiga Zaira y su hermana Violeta estaban completamente dormidas, vestidas. Las dos ni se calentaron en ponerse un piyama o algo, directamente se acostaron encima ni un poco de lugar le dejaron. Agarro su piyama y se fue al cuarto de Violeta a donde se cambio y se acostó, pero para su suerte el timbre de su casa sonó.
Rápidamente para no levantar sospechas y con miedo de que sus padres se despertaran corrió a abrir la puerta.
Paula: ¿Vos, qué haces acá?
Pablo: La vine a buscar a tu hermana... -Quiso pasar pero Paula lo empujo- ¿qué haces nena?
Paula: Nena tu abuela, anda a otra casa a molestar. Acá mi hermana esta durmiendo y no se va a levantar a esta hora para atenderte... -Cerró la puerta- ¡Boludo!
Mientras por otro lado Pedro se encontraba con ese supuesta "amiga", Julieta, que había conocido en ese boliche. La intención de Pedro era pasarla bien, bastante bien. Así que así fue que ellos dos se fueron al departamento de ella y tuvieron su noche de sexo, porque la verdad es que Pedro solo quería divertirse y el sexo es para esas personas que no sienten nada entre ellos y solo se divierten de esa forma o de otras.
